Salí a correr al bosque
sin camisa, pies sobre agujas de pino,
abriendo el aire con el cuerpo.
La manada aguarda
a la orilla de tu río
con hambre infinita.
sin camisa, pies sobre agujas de pino,
abriendo el aire con el cuerpo.
La manada aguarda
a la orilla de tu río
con hambre infinita.
Que vengan, pensé.
Y vinieron.
Y vinieron.